Renovando y Cambiando

     "Estoy aquí, aquí solita, pensando en hacer entradas bonitas" (8). Tiempo de sequía de ideas. Me pasé algunas tardes y noches pensando que corno escribir y nada, absolutamente nada venía a mi cabeza.

Escribir o no escribir? He ahí el dilema

Hasta que mire detenidamente mi habitáculo (mi cuarto, lelos/as) y me di cuenta que conservo, y no sé para que o tal vez si sé, cosas de tiempos anteriores: cuadernos, carpetas, libros, cartitas de chicas que ahora no saben que sigo viva. En su mayoría cosas de la escuela. También cosas personales, peluches y ropa. Esta bien tener cosas viejas, pero cuando son pocas y podes esbozar una sonrisa cuando las ves, todo lo contrario es mi caso, primero, que no son pocas cosas (ahí yo me fui a la mierda) son muchas y están dispersas, segundo, al verlas me generan enojo y lastima hacia mi. "¿Por qué escribiste eso? ¿En qué momento idiota de mi tu vida estabas cuando le escribiste esto a ella/as? ¿Por qué escribiste tan triste acá? ¿Por qué dibujaste tanto en tus cuadernos? ¿Por qué compraste eso? Maru, en esas fotos de primaria y secundaria, ¿ sonreías de verdad o era una mascara para que mamá no te retara por salir seria?" y la lista sigue de esos interrogantes que mi propia mente me hace.

El momento perfecto para hacerse bolita

       Tranquilamente puedo regalar...solamente la ropa, lo demás es basura que hay que quemar (NO MERECE VIVIR, LLÉVENLO A LA HOGUERA). Obviamente no faltan los ataques kamikazes, esos en donde agarras una bolsa grande negra y metes todo ahí, eso si, pobre del basurero cuando tenga que llevarse tu bolsa (pesa y luce como si albergara un cadáver). Me olvido de algo, los libros, manuales del año del jopo. Esos no puedo tirarlos, pero si apilarlos para formar un asiento. Hay que sobrevivir en los tiempos de crisis gente. 

Hay que ingeniárselas, aprendan de Homero

        El gran problema a esto es que di soluciones, pero yo, YO, no las aplico. Tengo esa maldita sensación de "en algún momento me hará falta, la voy a usar y salvaré el mundo", aún sigo esperando mi momento de gloria. Espero no ser la única demente que no puede soltar esas cosas (super masoquista de mi parte, lo sé) 
        Pero eso si! No me faltan las ganas de renovar o mejor dicho cambiar, pero de las ganas a los hechos hay un paso muuuuuy grande. ¿A alguien le ha pasado que su cuarto luce como una transición interminable, entre el/la nene/nena que eramos con el adulto joven que somos hoy? Si la respuesta es no, porque se creen muy maduros, sabré que mienten. Mi situación es que tengo las cosas viejas mezcladas con las cosas nuevas, es una ensalada de fruta. Aunque, si lo pensamos bien, es un tanto explicativo, ya que vemos las etapas de nuestra vida... Oh! Felicitaciones! De ser un loser pasaste a ser un winer! Yo me quedé en loser. Ríanse.

Me quedé en loser dije! Yo crecí, pero el mis cosas no

      ¡Ojo! No sólo lo material va quedando y avergonzándonos, sino que la música hace lo mismo. Todos sabemos que la música nos va definiendo a través de como nos sentimos o de lo que pensemos en ese momento, bueno, en otras palabras, a diferentes estados de animo diferente música (pobres los bipolares). Claro ejemplo de que la música tiene sus etapas con nosotros: YO, si, otra vez yo. En fin, años atrás, mi única preocupación era no ser comida por el Coco, mi música era la infantil, típica, "Piñón Fijo", "Mariana de Casa", "Gorillaz" (así es, a muy corta edad los conocí) y la música ochentosa y noventosa de papá. Ya en primaria, no sé que pasaba por mi mente que pasé a Miranda! y la música de papá. Inicios de secundaria, pop en inglés y estaba conociendo a Coldplay y ...música papá. Dos últimos años de secundaria, enojada y cansada de tener la vida que tenía, me pasé al metal, (también al industrial), Rammstein, Korn, Papa Roach, Mindlees self Indulgence, Deftones, Disturbed, algunas de Marilyn Manson, Eisbrecher, y la lista sigue.

Dónde dices que viven los One Direction?

Y ahora tengo el panorama mucho más abierto, y no es por alardear, pero conozco a tantas bandas y solistas que llego a hacerme un lío y parezco bizarra. Conozco más de lo que podrían ustedes, plebeyos de cuarta. A lo esencial: cuarto propio y música, dos artes que van creciendo y convirtiéndose junto con nosotros. A continuación les dejaré un vídeo, para aquel que se le cante la gana de ver y escuchar, es simplemente mi estado emocional hace dos años, no tanto por la letra en sí, sino por la tristeza y soledad que se rescatan de el. Vayan por la sombra, lectores/as.